sábado, 9 de octubre de 2010

La hora de la vendimia

El norte, en esta época, no sólo es hermoso por su traje de gala otoñal y las temperaturas que lo acompañan, sino también porque  se celebra el final de las diversas recolecciones de uvas.  La vendimia es crucial en el proceso de producción de vino y puede resultar una “montaña rusa” de emociones para sus productores. Una vez cerrada, los viñedos, los pueblos y sus bienvenidos visitantes festejan con júbilo.

La fecha de la vendimia depende del justo grado de maduración que se desea que alcance la uva, del equilibrio de los azúcares y el grado de acidez. Mientras más madura, más azúcar contiene y más alcohol produce la fermentación.  La madurez depende de la latitud, altura, temperatura, las lluvias, el viento y del tipo de uva. Mientras más al sur, más bajo y más calor, la uva acelera su maduración, se hace más dulce y pierde acidez. En todo caso, es posible compensar con los taninos y los aromas propios que desarrollan las diversas uvas.

La vendimia es mejor cuando se hace en las horas más frescas de día, cuando se hace con celeridad, cuando se evitan los ratos bajo el sol y cuando la cosecha se transporta lo más prontamente posible a la zona de recepción. Lo ideal es colectarla en cajas de madera pequeñas, para evitar que el peso de las uvas de arriba aplaste a las de abajo, haciendo que éstas segreguen prematuramente el jugo o mosto y se oxiden.

La recolección de uvas se efectúa de forma manual o mecanizada. La vendimia manual lo exigen los vinos de calidad y los terrenos difíciles. Facilitan desde el principio la selección de uva óptima, dejándose de lado las verdes, las muy maduras, las mojadas  y las hojas.  Se recomienda más para ciertos tipos de uvas como, por ejemplo, el Pinot Noir, el Beaujolais y el Champagne.  Sin embargo, en algunos países como Australia, el procedimiento manual es muy costoso en términos del personal que escasea. Además, involucra más tiempo.

La vendimia mecánica es mucho más rápida y económica en donde la mano de obra es cara. Se utiliza en áreas extensas y más planas. Las máquinas pueden adaptarse a ciertas necesidades y trabajar en forma precipitada, ininterrumpida y de noche, si se da el caso.  El Chardonnay se comporta bien bajo este tipo de cosecha. Sin embargo, en general, esta forma de recolección mecanizada involucra sacrificios en la calidad e  integridad de la uva y muchas denominaciones de origen restringen su uso.

Finalizada la cosecha y trasladada a los centros de recepción, comienzan las fiestas y con ellas sigue el proceso de producción del vino de calidad y de cantidad.  Actualmente, el norte no solo celebra el otoño, sino también la culminación de una etapa delicada, y a la vez emocionante, de la producción. ¡Aquí se come, se bebe y se baila!

El vino sigue su ritmo…

José Luis Estela
Inés Urdaneta


“Los hombres son como los vinos: La edad, agria los malos y mejora los buenos.”
Autor desconocido.

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